Peter Jackson pide ayuda para el caso 'Making a Murderer'

"Si has visto la segunda temporada de Making a Murderer, probablemente estás tan deprimido como yo", con esta contundente frase inicia el galardonado director Peter Jackson su carta de concienciación sobre el caso de Steven Avery y Brendan Dassey, sobre la cual gira la afamada serie documental de Netflix que recientemente estrenó su segunda temporada.

Para los que desconozcan el caso, el estadounidense Steven Avery pasó encerrado en prisión 18 años de manera errónea. Cuando una prueba de ADN le exculpó de un caso de violación y asesinato, fue liberado, y tomó represalias legales contra el estado de Winsconsin y más concretamente contra el Condado de Manitowoc, presentando una demanda federal de 36 millones de dólares. Dos años después, y en plena pugna de esa demanda, Avery fue detenido por el supuesto asesinato de la joven fotógrafa Teresa Halbach, cuyos restos fueron encontrados en el desguace de la familia Avery. Ahí empiezan los acontecimientos que, tirando de imágenes de archivo sobre el caso, interrogatorios y juicios, gira la exitosa serie documental de Making a Murderer.

Esta segunda temporada va más allá, a hechos mucho más recientes que concluyen a comienzos de este mismo verano. En ellos, la nueva abogada de Avery, Kathleen Zellner, consigue reunir incontables pruebas científicas que rebaten todo lo que se planteó en el juicio por parte de la fiscalía. Algo que ya se sospechaba y que ahora es probatorio. Sin embargo, las autoridades terminan negando el estudiar estas nuevas pruebas para una posible liberación tanto de Steven Avery como de su sobrino y supuesto cómplice, Brendan Dassey.

Al igual que ocurriera tras la primera temporada, el director Peter Jackson se muestra bastante afectado por todo lo sucedido, expresando sin pudor su rabia con respecto a lo sucedido: "Al menos seis hombres, que juraron proteger y servir al pueblo de Wisconsin, socavaron activamente el curso de la justicia y están felices de ver a dos hombres inocentes pudriéndose en prisión.  Son una escoria malvada [...] La investigación del asesinato de Teresa Halbach ha sido absorbida por un pozo negro de corrupción y autoprotección dentro del sistema judicial de Wisconsin [...] Disculpad mi lenguaje, pero que se jodan estos bastardos. No podemos sentarnos y dejar que estos imbéciles destruyan la vida de Brendan".

Y todo ello con dos claros objetivo. El primero que aquellos que quieran ayudar muestren su público apoyo al Centro de condenas injustas de menores que, entre otros, tienen en su mano el caso de Brendan Dassey. Y en segundo es en lo referente a las elecciones federales en Estados Unidos para decidir a los 435 asientos de la Cámara de Representantes y 33 escaños del Senado: "Siempre evito meterme en política, pero hoy es una excepción porque si hay habitantes de Winsconsin que están leyendo esto, les pido se tomen un momento para considerar la posibilidad de emitir un voto estratégico que podría cambiar las vidas de estos dos hombres".